Síndrome de Boreout en el trabajo

En su primera definición, el Boreout se describió como: “sentir la obligación de estar en el lugar de trabajo durante horas sin saber qué hacer”, y se basa en el sentimiento de aburrimiento que provoca la falta de expectativas en el trabajo.

El concepto, contrario al conocido síndrome del quemado o “burnout” fue introducido por los psiquiatras suizos Philippe Rothlin y Peter R. Werder en 2007. Este nuevo fenómeno, fue presentado por primera vez en su libro «El nuevo síndrome laboral: boreout» , generando una gran controversia en Alemania y posteriormente publicándose en España.

Los autores se basaron en las conclusiones de un estudio realizado en 2005 por Dan Malachowski sobre la pérdida de tiempo en el trabajo. Según este estudio, aproximadamente un tercio de los diez mil encuestados admitió no sentirse motivado en su trabajo, lo que resultaba en una dedicación promedio de dos horas diarias a resolver asuntos personales durante la jornada laboral. El Boreout se caracteriza por la falta de desafíos y estimulación en el trabajo, llevando a la desmotivación y la pérdida de interés en las tareas laborales.

El síndrome del Boreout es un fenómeno multicausal, lo que implica que puede tener diferentes motivos, que tienen que ver no solo con la propia empresa, sino también con los/as trabajadores/as y sus supervisores/as.

Algunos de los factores que contribuyen al Boreout, incluyen:

1.Falta de tareas o responsabilidades:

• Ausencia de asignaciones significativas o desafiantes para el/la trabajador/a.

2. Monotonía en las tareas:

• Realización repetitiva de tareas sin variedad ni estimulación.

3. Sobrecualificación para el puesto:

• Cuando el nivel de habilidades del/a colaborador/a excede los requisitos del trabajo asignado.

4. Falta de supervisión:

• Carencia de una guía clara o supervisión en el desempeño laboral

5. Falta de desafíos o estimulación:

• Ausencia de tareas que despierten interés o representen un desafío.

6. Falta de planificación:

• Escasa organización y planificación en la asignación de tareas

7. Falta de aprendizaje:

• Carencia de oportunidades para adquirir nuevos conocimientos o habilidades.

8. Poca interacción con los compañeros de trabajo:

• Limitada comunicación y colaboración con colegas.

9. Mala coordinación del equipo de trabajo:

• Falta de sincronización y cooperación efectiva entre los miembros del equipo

10. Imposibilidad de crecer en la empresa:

• Falta de oportunidades de desarrollo profesional o ascenso dentro de la organización.

Las señales que podrían indicar que alquien está experimentando el Síndrome de Boreout incluyen:

1. Irritabilidad o estrés laboral:
   • Manifestado a través de arrebatos de agresividad e ira en el entorno de trabajo.
2. Ansiedad:
   • Puede manifestarse en forma de crisis ocasionales relacionadas con la falta de estimulación y desafíos.
3. Retraimiento social:
   • Distanciamiento de compañeros/as, colegas e incluso seres queridos debido a la desmotivación laboral.

Además, en casos más extremos de Boreout, pueden surgir algunos síntomas indicativos de depresión. A nivel físico, se pueden experimentar:

1. Dolores de cabeza frecuentes:
   • Posiblemente relacionados con el estrés y la insatisfacción laboral.
2. Debilitamiento del sistema inmunitario y problemas de salud crónicos:
   • La desmotivación prolongada puede afectar negativamente la salud general.
3. Dificultad para dormir e insomnio:
   • Problemas relacionados con el sueño como resultado del malestar laboral.

Estos indicadores pueden servir como signos de alerta para identificar y abordar el síndrome de Boreout en los miembros del equipo, permitiendo así implementar estrategias para mejorar su bienestar y satisfacción laboral.

Philippe Rothlin y Peter R. Werder, quienes introdujeron el término «Boreout», definen las siguientes tres consecuencias principales de este fenómeno en su libro:

1.- Aburrimiento:

• • La falta de tareas significativas o la monotonía en las actividades laborales generan un sentimiento de apatía hacia el trabajo. La sensación de no saber qué hacer puede llevar a la desmotivación y al aburrimiento en el entorno laboral.

2.- Infraexigencia:

• • La falta de desafíos o la percepción de sobrecualificación conlleva un sentimiento de no estar aprovechando al máximo las habilidades y capacidades. Esto puede generar frustración y una sensación negativa respecto a la productividad y el valor personal en el ámbito laboral.

3. Desinterés:

• • La combinación de los factores anteriores resulta en una falta de motivación general que culmina en un desinterés hacia el trabajo. La pérdida de conexión emocional y de identificación con las tareas laborales puede afectar significativamente la satisfacción y el compromiso del empleado.

4.- Procrastinación:

• • Esta cuarta consecuencia no la mencionan Rothlin y Werder, pero me parece interesante aportarla. Una de las principales causas de la Procrastinación es dejar las cosas que no nos gustan o no nos motivan para más tarde, y esto se da de manera constante cuando tenemos el Síndrome del Boreout.

Estas consecuencias resaltan la importancia de abordar el Boreout para evitar el impacto negativo en el bienestar y desempeño laboral de los/as trabajadores/as y el último término en la productividad de la empresa.

1. Mezcla las tareas:

• • Distribuye las responsabilidades entre el equipo para evitar la monotonía. Rotaciones semanales o colaboraciones interdepartamentales pueden brindar a los/as empleados/as nuevas experiencias y desafíos.

2. Aprovecha el tiempo para avanzar:

• • Cuando la carga de trabajo es más ligera, fomenta la búsqueda de proyectos adicionales que beneficien a la empresa y permitan a los/as colaboradores/as utilizar sus habilidades de manera productiva.

3. Promueve un equilibrio entre la vida laboral y personal:

• • Garantiza que el equipo no trabaje más horas de las necesarias. Asigna tareas desafiantes y claras, y alienta a los empleados a desconectarse después del trabajo para mantener un equilibrio saludable.

4. Sé flexible con tu equipo:

• • Adapta el enfoque de trabajo según las necesidades individuales. Si el equipo se siente fatigado, considera soluciones flexibles como horarios dinámicos o esquemas de trabajo desde casa.

5. Reserva tiempo para las reuniones:

• • Aunque el trabajo sea remoto, programa reuniones virtuales periódicas para mantener una conexión frecuente. Preguntar sobre el bienestar y la carga de trabajo durante estas reuniones ayuda a identificar posibles problemas.

6. Escucha la voz de tus colaboradores/as:

• • Solicita feedback continuo para comprender las percepciones y necesidades actuales del equipo. Este enfoque facilita la identificación de áreas de mejora y contribuye al crecimiento y la motivación de las personas.

Sin embargo, no siempre las organizaciones ni sus responsables toman en cuenta estas acciones, así que hay veces que te tocará a ti ponerte manos a la obra por tu cuenta. Para ello, te sugiero:

– Busca actividades que te motiven fuera del horario laboral (teatro, deporte, cocinar, etc.).

– Haz listas de cosas que quieres conseguir a corto y largo plazo para tener perspectiva y evitar empantanarte en la rutina.

– O acude a un profesional de la salud mental o un coach. Te aseguro que un buen número de las personas que acuden a mí, es por este motivo… y también te aseguro que la gran mayoría mejoran con sus procesos de Coaching. Si es esta tu situación, puedes pedirme una reunión de asesoramiento totalmente gratuita. 

En definitiva, y como suelo mencionar habitualmente, las empresas son entes complejos, que funcionan o no según el comportamiento de las personas que trabajan en ellas. Y es por eso mismo, porque son personas y no robots, por lo que debemos cuidar los aspectos psicológicos, el bienestar y la salud mental como pilares de unas relaciones profesionales sanas, y, por supuesto, productivas.

Y para ello, entre otras muchas cosas, debemos estar muy alerta con el Síndrome de Boreout en el trabajo.